Osos del Parque del Retiro de Madrid

Se trata de una de las dos figuras idénticas ubicadas en la antigua Casa de Fieras del Parque del Retiro, originaria del primer tercio del siglo XIX, bajo el reinado de Fernando VII, adornando las entradas a las oseras. Estas dos esculturas, talaldas en torno a 1850, están relacionadas a su vez con otros dos osos tumbados del mismo paseo central de los Jardines de Herrero Palacios, con los dos leones que coronan la antigua entrada al sitio y los que, fuera de este sitio, adornan la Montaña Artificial], todos de técnica parecida y seguramente realizados como respuesta a un mismo proyecto de adorno de ese recinto ya perdido. Una calle cubierta por una pérgola une estas figuras con las de los osos tumbados que se encuentran al final de la misma, por lo que este espacio urbano debería entenderse como un todo.