El transporte activo se caracteriza por realizarse en contra del gradiente de concentración de la sustancia, precisa energía y proteína transportadora (bombas). Este mecanismo es el característico mediante el cual diferentes iones atraviesan las membranas biológicas.
La bomba de Na+ -K+ requiere energía en forma de ATP para su acción. La proteína se fosforila y experimenta una transconformación, la cual resulta necesaria para realizar su función. Al desfosforilarse la bomba recupera su conformación inicial.